Vestimenta

Un Sikh siempre es reconocido por su turbante. Él o ella ata su cabello al tope de su coronilla en un “nudo rishi” y luego lo cubre con tela de algodón realizando una elegante corona. Existe una variedad de estilos de turbantes pero principalmente se dividen entre masculino y femenino. En India muchas mujeres no usan turbante pero se cubren la cabeza con un pañuelo o “chuni”. Cuando llegó Yogi Bhajan, él alentó a las mujeres occidentales a volver a las tradiciones ancestrales y reclamar por su derecho a utilizar el turbante que es parte de su identidad y gracia.
La vestimenta distintiva del Sikh es el Bana, túnica de telas nobles lo cual lo hace a él o ella, responsable en todo momento de representar al Guru. Por lo tanto, él o ella actúan con ese conocimiento, con nobleza, como un santo y un soldado.
Vida honesta
Un Sikh vive en el mundo como un jefe de hogar, ganándose una vida honesta. En medio de la bruma de las impurezas y vicios de la sociedad, él o ella permanecen inmersos en el amor a Dios y al Guru. Un Sikh es honorable en todos sus tratos y se gana la vida rectamente a través de una labor honesta. Si surge alguna disputa que no pueda resolverse entre las partes involucradas, el Guru ha instruido a sus Sikhs a someter el asunto a una asamblea de cinco Sikhs para su arbitraje.
Matrimonio

Los Sikhs se casan en presencia del Guru y su compromiso con Dios y el Guru se refleja en el compromiso con su familia. El estilo de vida del Sikh es el éstilo de vida del éxito, y para tener éxito en el matrimonio, monogamia es un prerequisito básico. El sexo extramarital es contrario a la ciencia del estilo de vida del Sikh Dharma.
Nada que altere la consciencia
Un Sikh mira el cuerpo y la mente como el Templo de Dios. Ningún tóxico o droga que deteriore la consciencia deberá introducirse al cuerpo. Para ser»santo», uno conoce lo que entra y lo que sale de los nueve hoyos del cuerpo.

Relación con la mente
Un Sikh medita en el Amrit Vela, horas ambrosiales de la madrugada y limpia su mente a diario con el propósito de conectarse con su intuición y Divinidad. Además, trata de evitar los lugares y gente que distrae la mente de pensamientos sanos y elevados. Un Sikh busca la compañía de seres amantes de Dios que aman cantar versos de alabanza a Dios y hablar de temas que inspiren y eleven el espíritu para estar en Charhdi Kala.

Alimentación
La dieta de un Sikh es la comida del Iangar del Guru (cocina gratuita) que es lacto-vegetariana. Ella incluye vegetales, granos, frutas y nueces, así como leche y productos lácteos. Ni carne, ni aves, ni pescado, ni huevos son parte de la dieta Sikh.
Seva
Un Sikh se dedica a realizar “seva” o servicio desinteresado, ofreciendo ayuda a aquellos menos afortunados, así como da el Das Vandh que es un diez por ciento de sus ingresos como ofrenda al Guru. Un Sikh es por definición caritativo, amable, paciente, comprensivo, sin miedo y tolerante con todas las personas.
Aquí un ejemplo de un Seva hecho por Sikhs día a día en el Templo Dorado.
Guerrero

Él o ella está preparado para ir en ayuda de cualquier otro ser humano en necesidad. Él es un defensor del débil, proveedor del pobre y una inspiración para el oprimido. Un Sikh no permitirá ningún insulto a una mujer, al Siri Guru Granth Sahib, o a algún Gurdwara o lugar de adoración de cualquier religión. Él esta presto a defender a cada uno con su vida. Él o ella es el sirviente de Dios, un soldado de la justicia